Ascensión al Mont Blanc (Alpes), montaña de sensaciones
Cada año con la llegada del verano y el periodo de vacaciones nos ponemos hacer planes de escaladas y ascensiones que tenemos en mente, esto es bueno pues ya empezamos a disfrutamos del recorrido con el hecho de planificar y ver las primeras fotos de nuestro objetivo.
La montaña espacio de libertad.
Hay más de doscientos años de historia del alpinismo en el Macizo del Mont Blanc, y todavía hay mucha gente que nos pregunta porque se sube a esas montañas y la respuesta es siempre la misma “simplemente porque están ahí “
El Mont Blanc es una montaña de 4.810m de altura, normalmente este hecho no se tiene en cuenta y solo se piensa en los pasos técnicos, que son más evidente que hay que tener en cuenta, pero la altura genera varios cambios en el organismo y en las situaciones meteorológicas que no se ven de forma tan tangible pero están ahí.
La altura nos hace que cuando camínenos sintamos que no podemos acelerar puesto que las pulsaciones se nos disparara y tenemos que reducir nuestro paso, además la sensación de fatiga es más constante y esto hace que podamos fallar en nuestro empeño de llegar a la cumbre a sentirnos más fatigados de lo normal. Para solucionar estos problemas es necesario que cuando vayamos a subir a la cumbre los días antes tengamos una o dos salidas a cumbres de 4000n para aclimatarnos.
Otro problema de la altura son las condiciones meteorológicas el frio y el viento, en el Mont Blanc puede haber días muy claros sin ni una nube pero con vientos de 40km/h que a esas alturas supone una sensación térmica de muchos grados bajo cero, por lo que siempre debemos de llevar el material especifico para podernos proteger de las congelaciones a causa de estas condiciones aunque en el fondo del valle el día sea de verano.
Otro problema de la subida es el uso de piolet y crampones, estos materiales los debemos de llevar muchas horas puestos y es necesario el tener experiencia en su manejo para no desgastarse demasiado y según que situaciones del la nieve (que este muy dura) puede suponer el éxito o el fracaso de la cumbre, para mejor con los crampones una vuelta un día en el mer de glace puede ser de gran ayuda para trabajar y experimentar las sensaciones con el hielo duro del glaciar y practicar un poco la posiciones de todas las puntas.
Deseos y realidad.
Ascender a cualquier montaña de los Alpes es un reto importante ya que se encuentran en lugares rodeados de glaciares y alturas considerables. La elección de cualquier ruta se debe de hacer buscando el equilibrio entre el deseo y la realidad. “no siempre el objetivo más alto es el más apropiado”
Aquí puedes visitar nuestras actividades de montaña en los Alpes